Golden Axe es un juego de peleas para Arcade, entre otros sistemas, publicado por Sega en 1989.
Un ejército de bestias infernales, liderados por el despiadado Death-Adder, surgió de la nada aniquilando a todos los que osaron ofrecer resistencia. Y lo peor es que han encerrado al rey y a la princesa en su propio castillo para ejecutarlos.
Los tres mejores guerreros del reino de Yuria tienen dos cosas en común: Su gran habilidad para la lucha, y que han perdido a sus seres queridos a manos de los invasores. Tras jurar venganza, se encaminan a ajustar cuentas con el tirano opresor.
Hasta la fortaleza ocupada por Death-Adder nos separa un largo camino. Tendremos que atravesar desiertos, aldeas, ciudadelas, y pasajes que no son lo que aparentan en realidad, pues ocultan sorpresas para nada agradables.
Cada uno de los héroes posee diferentes fortalezas y debilidades: Gilius es el mas diestro en el combate, Tyris posee una gran habilidad para la magia, y Ax es el luchador mas equilibrado tanto en manejo de la espada como en el uso de hechizos.
Las hordas del ejército invasor están compuestas de efectivos de la peor calaña, tales como mercenarios, amazonas, gigantes armados con martillos, caballeros envueltos en corazas, e incluso abominaciones sobrenaturales.
Algunos de nuestros enemigos emplean extrañas criaturas para atacarnos, pero si somos capaces de derribarlos podremos dominarlas nosotros y aprovechar sus extraordinarias habilidades en el campo de batalla.
Nuestra energía y poder mágico se debilitarán según enfrentemos refriegas, pero podremos recuperarlo si le quitamos comida y pócimas a los duendes que pululan por las tierras de Yuria. Ellos también nos robarán en cuanto tengan oportunidad…
En el longplay de Golden Axe para Arcade, Ax-Battler hace uso de su destreza con la espada y la magia, liberando al reino de su mayor amenaza al término de los cinco escenarios del juego, y restuarando finalmente el Hacha Dorada.
Como contenido extra, mostramos una violenta escena adicional presente en la versión japonesa del juego, junto con la de selección de personajes de esa misma revisión. También enseñamos el repertorio de golpes y magias de Tyris y Gilius, y el de todos los enemigos del juego.
Para ejecutar nuestra venganza con éxito hay que superar un total de cinco fases diferentes. Al finalizar las cuatro primeras accedemos a una pantalla de bonus, donde tendremos la posibilidad de recargar nuestra vitalidad y poder mágico.
No existe una limitación de tiempo para completar un nivel, pero si permanecemos mucho tiempo en el mismo sitio sin avanzar, se materializarán dos esqueletos sombra, extremadamente resistentes y complicados de abatir.
Para cada vida disponemos de tres unidades de energía, que disminuirán si sufrimos daño tanto de los enemigos como de nuestros aliados. También moriremos instantáneamente si caemos o somos arrojados por algún precipicio.
Disponemos de un abanico de tres personajes diferentes a elegir. Todos ellos poseen el mismo repertorio de golpes, con sutiles matices, y se diferencian en su fuerza, rapidez, alcance y sobre todo, en su capacidad para invocar magia:
- Gilius-Thunderhead: El enano es el mas fuerte y el que mas alcance consigue con su hacha. Su ataque trasero es único, ejecutando una voltereta en el suelo en lugar de girar sobre sí mismo. Por contra, su hechizo del rayo es muy débil
- Ax-Battler: Es el elegido para esta aventura. Emplea los mismos ataques que la amazona dotándoles de mas alcance, y posee mayor fortaleza. Su magia de tierra es bastante poderosa, abarcando un total de cuatro niveles de potencia
- Tyris-Flare: Es la mas rápida, pero también la que mas daño sufre y la que menor alcance consigue con su espada. Su poder mágico de fuego es devastador, llegando a alcanzar hasta un total de seis niveles
Podemos caminar en ocho direcciones distintas, correr, y saltar en dos alturas diferentes. Con la espada ejecutaremos hasta tres combos diferentes, que varían según la distancia a la que se encuentra nuestro antagonista.
El mandoble en el aire, a pesar de ser muy fácil de ejecutar, es sin duda nuestro mejor recurso ofensivo, ya que es efectivo con todos los enemigos del juego sin excepción. Ideal para lograr salir airosos de situaciones muy comprometidas.
Junto a los ataques básicos están los movimientos especiales, como la embestida, el golpe con giro y la caída en picado, éste ultimo el mas letal de todo nuestro repertorio. Se obtienen con diferentes combinaciones de palanca y botones.
Respecto a la capacidad mágica, se divide en diferentes niveles que invocan un poder específico, sólo alcanzables con un determinado número de vasijas. El conjuro será mas potente cuanta mayor sea el nivel obtenido en ese momento.
Cada vez que liberamos la magia consumimos todas las pócimas que transportamos. Podemos conseguir mas de los duendes azules, unos personajillos que ocasionalmente merodean por los escenarios y por las áreas de bonificación.
Estos enanitos azulados, junto a otros de color verde que transportan comida, intentarán robar nuestras botellas mágicas mientras dormitamos entre fase y fase. Si tardamos en arrebatárselas se escabullirán con su botín entre las sombras.
El ejercito de Death-Adder lo componen diferentes soldados y criaturas, cuya peligrosidad viene dada por el color de su uniforme. Al final de cada pasaje nos enfrentaremos a los miembros de élite de sus tropas, todos ellos de especial dureza:
- Heninger y Longmoan: Soldados estándar de combate. Poseen un combo de ataque, embestida y golpe en salto. Pueden montar criaturas
- Storchinaya, Strobaya y Lemanaya: Suelen aparecer cabalgando sobre bestias. Poseen un único combo de ataque y pueden embestirnos
- Esqueletos: Son los enemigos básicos mas complicados del juego. Disponen de nuestros mismos ataques y son muy rápidos y poderosos. No saben tomar las riendas de los bizarrians, pero ni falta que les hace
- Bad Bros, Sargentos Mal y Hop, General Heartland: Suelen combatir en pareja, armados con martillos que nos puede hacer mucho daño. Pueden lanzarnos por el aire y embestirnos, pero no subirse a lomos de criaturas
- Lugarteniente y Coronel Bitter: Dotados de un gigantesco espadón y un voluminoso escudo con el que pueden incluso golpearnos. No pueden correr ni montar bestias, dada su gran envergadura y pesado equipamiento
- Death-Adder: Con su enorme hacha puede derribarnos sin esfuerzo, y a grandes distancias puede lanzar proyectiles mágicos a ras de suelo. Aunque puede correr, no tiene por costumbre el arremeter contra nosotros
Como ya hemos mencionado, ciertos acólitos del invasor van a lomos de unas bestias denominadas Bizarrians. Si los tiramos al suelo podremos montarlas nosotros y aprovecharnos de sus poderosas capacidades de combate:
- Cocatriz: Mitad ave mitad escorpión, puede derribar enemigos dando coletazos en ambas direcciones, y arrojarse sobre ellos picoteándolos
- Dragón azul: Proyecta una poderosa llamarada hacia el suelo, y puede acometer brutales embestidas mediante potentes testarazos
- Dragón rojo: Se diferencia del azul en que escupe mortíferas bolas de fuego por su boca, con mayor cadencia de disparo
Todas estas criaturas disponen de la capacidad de saltar, pero no pueden atacar desde el aire. Si no son utilizadas permanecen durmiendo hasta que deciden escapar del lugar, perdiendo nosotros la oportunidad de usar sus habilidades.
Golden Axe emplea un original sistema de puntuación, no visible durante el juego pero que sí se nos muestra al finalizar la partida, otorgándonos un ranking determinado en base a como hemos luchado contra nuestros adversarios.
Para calcular nuestra actuación se emplea la formula F(((0,5 + 0,5L) * E * A) * M) / V:
- L= Escenario que hemos alcanzado (Uno-Cinco)
- E= Tipo de enemigo. Los normales puntúan uno, los jefes de final de nivel dos, y el temible Death-Adder nos da la friolera cantidad de ocho puntos
- A= Ataque con el que rematamos a un rival. Varios golpes en la cabeza seguidos de una patada valen tres, una patada o proyección dos, y el resto uno
- M= Magia. Si tras acabar con un oponente invocamos la magia, la puntuación se multiplica. Si conseguimos encadenar varios hechizos antes de que su cuerpo toque el suelo, incrementaremos exponencialmente nuestro contador
- V= Vidas perdidas. Al terminar la aventura, la totalidad de puntos obtenidos se divide por la cantidad de veces que hemos caído en combate
En las tierras desérticas nos enfrentamos a los ejércitos de Death-Adder por primera vez, y obtendremos nuestras primeras pócimas mágicas desvalijando a un duende azul. También podremos montar nuestro primer bizarrian, la Cocatriz.
Esta bestia tiene la particularidad de que puede barrer con su cola de un lado a otro sin tener que girarse. Ciertos enemigos como Heninger y Longmoan pueden esquivar el movimiento saltando, para acto seguido golpearnos desde el aire.
Cuando un bizarrian se queda sin jinete, nuestros rivales priorizan subirse sobre la criatura en lugar de encararnos. Por ello es relativamente sencillo cogerlos desprevenidos sin que les dé tiempo a defenderse.
Al final del nivel nos aguardan los Bad Bros junto a un par de secuaces, uno de ellos a lomos de una Cocatriz. Tras mermar a nuestros rivales a base de coletazos, invocamos la magia en su máxima capacidad para acabar definitivamente con ellos.
Una táctica muy útil cuando nos vemos rodeados de varios acólitos, es desplazarnos subiendo y bajando dibujando trayectorias circulares, para ir eliminando oponentes cuando estén suficientemente cerca de nuestra posición.
En el primer nivel de bonus del juego recuperaremos nuestras reservas mágicas, castigando al enano que nos visita de noche. En partidas de dos jugadores es posible recuperar toda nuestra vitalidad aquí mediante una sencilla artimaña.
Dado que los héroes pueden atacarse entre ellos, basta con golpear a nuestro acompañante hasta vaciar toda su energía, teniendo cuidado de no derribarlo ya que sino si que moriría. Con esto iniciaremos la siguiente fase con la vida a tope.
Nos aproximamos a la Villa Tortuga, un asentamiento de lugareños que ha sido tomado por mas tropas usurpadoras, unas huestes muy experimentadas y peligrosas, mucho mas diestras que con las que batallamos anteriormente.
A pesar de la ferocidad de nuestros antagonistas, la inteligencia no es su fuerte. Si corremos hacía ellos intentarán atizarnos, pero fallarán y podremos ponernos a sus espaldas. Es ahora cuando tenemos la oportunidad de diezmarlos sin piedad.
En momentos puntuales aparecen soldados torturando a aldeanos. Es una situación inmejorable para infringirles el mayor daño posible, por ejemplo con una estocada en picado, ya que al estar distraídos no podrán evitar nuestros ataques.
Un nuevo bizarrian entra en escena, el poderoso Dragón azul. Si somos capaces de mantenernos sobre su lomo sin perderlo nuestra lucha se simplifica en gran medida, ya que las llamas que emite por su boca nos dan una gran ventaje en combate.
El plato fuerte de esta fase viene compuesto por varias amazonas, una de ellas galopando sobre un nuevo dragón, y de un temible esqueleto. Para salir airosos del encuentro es esencial tener al azulado reptil de nuestro lado.
Es hora de reposar y de participar en un nuevo bonus, en el cual también podremos rellenar nuestra vida gracias a un duende verde. Es importante saber que la comida obtenida no aumenta nuestra salud si la tenemos en su máxima capacidad.
La Villa Tortuga toma esa denominación debido a que se asienta sobre el caparazón de un gigantesco reptil. El bicho nos transporta hasta tierra firme, cerca de una ciudadela que también ha sido conquistada por los seguidores de Death-Adder.
El comité de bienvenida lo componen multitud de fieros guerreros, algunos montados en bizarrians. Es en el Dragón rojo en quien focalizaremos toda nuestra atención y empeño, a fin de reclutarlo para nuestras filas lo antes posible.
Como ocurría en el anterior nivel con el otro dragón azul, conservar en nuestro poder a esta nueva bestia rosada va a marcar la diferencia entre un agradable paseo por la ciudad o una auténtica pesadilla hecha realidad.
El acceso principal al asentamiento es un puente en ruinas, que cruzaremos sin vacilar ejecutando una embestida con nuestra criatura. Igualmente puede ser superado con uno de nuestros potentes saltos.
Es momento de medirnos a los Sargentos Mal y Hop, a los que mantendremos a raya a base de bolas de fuego y testarazos. En caso de que ejecuten una carga al mismo tiempo que nosotros, solemos tener prioridad en el momento del impacto.
En la plaza del pueblo, tras aprovisionarnos de ánforas mágicas, nos las veremos con el temible Lugarteniente Bitter y sus escoltas. Aunque es muy lento, si no mantenemos la distancia de seguridad nos pulverizará con su mortífero acero.
Como hemos señalado con anterioridad, el Dragón rojo y sus bolas flamígeras van a ser decisivos para decantar la balanza a nuestro favor en esta desigual escaramuza con Bitter, al que daremos la puntilla invocando una letal erupción volcánica.
Toca aprovisionarnos de comida y magia en un nuevo nivel de bonificación. Si aún conservamos vasijas en nuestro poder, los duendes azules nos las robarán mientras descansamos, por lo que tendremos que quitárselas antes de que escapen con ellas.
Hemos llegado a los aledaños del castillo del reino, pero por desgracia está fuertemente defendido. Existe un atajo para acceder a la fortaleza conocido como el Camino del demonio, y pronto descubriremos el porqué…
Como sucede en otros juegos de lucha, podemos evitar el finalizar nuestros combos. Esto puede ser un gran recurso cuando tenemos rivales a ambos lados, ya que los dejamos momentáneamente aturdidos mientras vamos mermando su vitalidad.
El nivel está plagado de esqueletos, los adversarios mas duros con diferencia ya que disponen de un repertorio de ataques simplemente demoledor. Para agravar aún mas la situación, apenas encontraremos duendes de los que obtener pócimas.
Junto al infalible salto y espadazo, otra manera segura de acabar con los no muertos es aprovechar las desigualdades del terreno. Si les atacamos desde un nivel inferior sin completar nuestro combo, los neutralizaremos sin que puedan hacernos daño.
Todo enemigo al ser derribado tarda un breve lapso de tiempo en incorporarse, momento en el que es plenamente vulnerable. Con práctica y el timing adecuado podremos rematarlos con un ataque en picado y mandarlos al averno rápidamente.
En lo mas alto del pasaje libraremos una cruenta y decisiva batalla contra esqueletos y sombras de mercenarios caídos en combate. Todos ellos son rivales de consideración, capaces incluso de esquivar nuestras mortíferas estocadas.
Con el mandoble en picado podemos engañarlos si esperamos hasta el último momento para apretar disparo. Cuando detecten nuestra pulsación será demasiado tarde y ya no podrán apartarse a tiempo, recibiendo un daño considerable.
La última zona de bonus del juego nos recompensa con una porción de carne y suficientes botellas mágicas para llenar nuestro medidor hasta la mitad. No debemos dejar nada sin recoger, puede que mas adelante lo echemos en falta…
El Camino del demonio es en realidad una gigantesca águila, que nos lleva en volandas a la entrada de la Fortaleza dónde el rey y su hija permanecen cautivos. Es curioso la cantidad de animales talla extra grande que pueblan la tierra de Yuria…
Unos pocos esqueletos salen a despedirnos de este tétrico escenario. Si no queremos desperdiciar nuestras energías con ellos, lo mas conveniente es hacer uso de ataques en picado o empujarlos al vacío desde la plataforma flotante.
Podemos aprovecharnos de la poca inteligencia que poseen algunos de nuestros contrincantes, provocándoles para que nos embistan cerca de un precipicio. Nos apartaremos en el último instante dejando que se precipiten al abismo sin remisión.
En el patio exterior tomamos las riendas de un nuevo Dragón azul que va a ser vital para afrontar los siguientes y decisivos combates. Tras derrotar a varias uniades Henniger y Longmoan nos toca medirnos a dos Coroneles Bitter.
Gracias a la potencia de fuego de nuestra bestia es relativamente sencillo tener bajo control a los caballeros armados, pero para evitar mayores complicaciones hemos de asegurarnos de no perder la distancia y de que no nos ganen nuestra espalda.
En los aledaños del salón del trono tres duendes azules nos van a surtir de poderes mágicos. Tras rellenar por completo nuestro marcador dejamos a nuestro alcance los botijos sobrantes, ya que nos pueden ser de gran utilidad durante la refriega.
El primer escollo a superar en la batalla final es la escolta personal de Death-Adder, compuesta por dos soldados estándar del mas alto rango y el General Heartland. Lo mejor para nosotros será someterlos antes de que el gran villano se materialice.
Por desgracia somos descabalgados a las primeras de cambio, perdiendo la ventaja del bizarrian y lo que es peor, teniéndolo ahora como enemigo. Es el momento de desatar nuestro poder mágico para así poder recuperar a nuestro reptil favorito.
Tras acabar con los sádicos guardaespaldas, tres esqueletos los sustituyen en sus funciones. Repetimos la táctica de subir y bajar por el escenario para acabar uno a uno con ellos, aprovechando ahora las pócimas que dejamos sin recoger en el suelo.
A pesar de su imponente aspecto, Death-Adder no resulta complicado en exceso. Su mandoble de hacha es lento y su proyectil mágico puede ser esquivado con una finta o saltando. Aún así consigue alcanzarnos, provocando que nuestra bestia huya.
Nuestra táctica a seguir para derrotarlo es lograr tirarlo al suelo, y sucesivamente atacar una y otra vez con la estocada en salto antes de que pueda incorporarse, lanzándolo de un lado a otro de la estancia hasta terminar definitivamente con él.
¡¡Has jurado no descansar hasta recuperar el Hacha dorada y vengar a toda la gente asesinada!!
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